Elegir bien un lugar concreto, el estado general del edificio/urbanización, incluso los servicios públicos próximos, van a ser decisivos en tu acierto.
Puesto que no sólo vamos a comprar, si no que también tendremos que mantenerla, es importante hacer un pre-estudio para analizar si esta segunda residencia es económicamente rentable.
Elegir un lugar que te guste mucho pero con fácil accesibilidad y que disponga de todos los servicios necesarios en un pequeño radio será un gran acierto con vistas a tu propia comodidad o a una futura reventa.
Por otra parte, si sólo la vas a utilizar durante una temporada concreta, es más que recomendable que la alquiles durante el resto del verano o del año para sacarle una mayor rentabilidad. Además, recuerda que una casa vacía se deteriora en mayor medida y más rápido que una casa que está siendo utilizada con regularidad.
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